¿Dolor de rodilla? Conozca las causas, síntomas y tratamientos
¿Cómo prevenir la inflamación de la rótula o de las articulaciones en la rodilla?
Es muy importante identificar los primeros síntomas de inflamación de la rótula a tiempo y buscar tratamiento a tiempo.
A medida que envejecemos, es común sentir que nuestras articulaciones no son tan flexibles como antes. Y es que envejecer no es un proceso fácil. Conlleva mucho sacrificio y dolor. A los que nos acercamos o estamos en la tercera edad, seguro que ya habremos sentido alguno de los síntomas asociados a la Osteoartritis (OA), por ejemplo.
No se conoce totalmente lo que causa la OA, aún que los especialistas saben que es una enfermedad hereditaria que evoluciona a la medida que avanzamos en edad. Las mujeres están más propensas a sufrir de OA, sobre todo después de los 50. Sin embargo, los primeros síntomas podrán surgir a los cuarenta y después evolucionar lentamente.
Las mujeres están más propensas a sufrir de Osteoartritis, sobre todo después de los 50.
Rodillas sanas se doblan y estiran sin dolor, gracias a la almohadilla esponjosa que cubre y protege las extremidades de los huesos: el cartílago. A medida que envejecemos, con la deterioración del cartílago, esa capa protectora se va poniendo más fina y resultará en fricción de los huesos.
En algunos casos, la OA puede incluso causar problemas de movilidad que cambiarán totalmente la forma como llevamos a cabo las tareas más sencillas, tales como transportar cosas por las escaleras, sin necesidad de apoyarse o miedo a caerse.
Es importante que nos mantengamos activos e independientes, por el mayor tiempo posible. Pero con la edad, una lesión por accidente o exceso de ejercicio de elevado impacto puede evolucionar hacía una condición de Osteoartritis. Por eso, es muy importante identificar los primeros síntomas a tiempo y hacer lo posible por no empeorar.
¿Cómo es vivir con Osteoartritis (OA)?
Estos son los factores determinantes que podrían influir en la aparición de la Osteoartritis:
- Edad: la capacidad que el cartílago tiene de reparase es menor a medida que envejecemos;
- Hereditario: algunos genes están asociados a la Osteoartritis. Cualquier deformidad en las piernas podrá afectar las articulaciones y elevar el riesgo de OA en las rodillas;
- Peso: cuanto más elevado el peso, mayor será la presión sobre sus rodillas.
- Lesión: una lesión en la rodilla, aún que sea antigua, puede conllevar a Osteoartritis en la articulación de esa rodilla.
- Desgaste por uso excesivo: hacer deporte es bueno para la salud, pero hay determinados ejercicios o trabajos en los que tenemos que agacharnos o arrodillarnos muchas veces, coger pesos, y las articulaciones terminan desgastándose. Esto esfuerzo o sobrecarga en las articulaciones de las rodillas las hará más propensas a padecer de Osteoartritis en el futuro.
- Otras enfermedades: por ejemplo, las personas que padecen de Lupus y Lyme son más propensas a padecer de OA.
Así, y teniendo en cuenta que la OA es una condición que empeora con el pasar de los años, cuanto antes empecemos la labor de prevención, más tiempo nos quedará para cuidar y conservar la salud de nuestras rodillas.
¿Cómo cuidar la inflamación y rigidez en las rodillas?
A pesar de que no existe cura para la Artritis Reumatoide (AR) y la Osteoartritis (OA), existen tratamientos que pueden proporcionar alivio a las articulaciones inflamadas y calmar el dolor. Si el tratamiento se realiza en la fase inicial de la enfermedad, se conseguirán buenos resultados y se logrará ralentizar la evolución de la enfermedad. Si este es su caso, deberá seguir enfocándose en la prevención para que las articulaciones no lleguen al punto del desgaste irreparable: ¡ahorre sus rodillas lo más que pueda!
Si, por otro lado, el dolor que siente es demasiado fuerte, consultar un especialista es siempre el primer paso que dar. Algunos fármacos e inyecciones pueden proporcionar un alivio inmediato. Sin embargo, y debido a los efectos secundarios, deberá también saber que existen alternativas que su médico podría indicarle. Por ejemplo:
- Masajear las rodillascon una crema o gel antinflamatorio puede proporcionar alivio y ayudar a deshinchar las zonas inflamadas;
- Un fisioterapeutapodrá enseñarle algunos ejercicios específicos para ayudarle a aumentar la flexibilidad y el rango de sus movimientos, a través del refuerzo de los músculos alrededor de las rodillas, evitando que se causen más daños. Si el ejercicio no se realiza según indicación de un fisioterapeuta, podrá empeorar la lesión.
Si el dolor que siente es tolerable, pero aun así siente que eso le afecta su rutina, su médico podrá recomendarles algunos cambios en su estilo de vida para proteger sus articulaciones o al menos ralentizar el proceso degenerativo del cartílago. Tenga en cuenta lo siguiente:
- Ejercicio de mínimo impacto: caminar, nadar, ejercicios aeróbicos acuáticos pueden ser algunos de los ejercicios más apropiados. También hay que recordar que es necesario utilizar calzado adecuado para minimizar el impacto en las articulaciones de las rodillas mientras camina. También se aconseja hacer pausas durante el ejercicio si nota que el dolor aumenta.
- Ejercitar los cuádriceps: siempre a través de ejercicios de mínimo impacto, no debemos olvidar esta zona del cuerpo, que se encuentra en la cara anterior del fémur, que se une a nuestra cadera y soporta nuestro peso al caminar, sentar, correr, etc. Si reforzamos estos músculos, estaremos aumentando nuestra flexibilidad de movimientos lo que significará también un alivio para nuestras rodillas.
- Utilizar una férulaen la rodilla ayudará a la estabilidad de la rodilla y proporcionará alivio del dolor.
- Los suplementos de glucosaminapodrán ayudar a aliviar algunos de los síntomas más leves. La glucosamina es un químico natural que se encuentra en el cartílago y se cree que su ingestión podrá ayudar a renovar el cartílago dañado.
- Dieta: a pesar de que no existe ninguna dieta específica para esta condición, algunos estudios demuestran que algunos de los síntomas y la inflamación de las articulaciones puede empeorar si engerimos géneros alimenticios ricos en grasa o derivados de la leche. Por otro lado, hay personas que reportan sentir alivio al ingerir alimentos ricos en ácidos Omega-3, como el salmón, el tofu y nueces. Por supuesto, la dieta mediterránea, rica en frutas, vegetables, cereales y aceite de oliva, podrá ayudar a que sienta su condición física mejorada, además de incrementar su vitalidad.
- Perder peso: si tiene exceso de peso, su Osteoartritis podrá empeorar. Al perder unos cuantos kilos, estará reduciendo la cantidad de tensión sobre su rodilla. Es importante que tenga el peso adecuado para su edad y estatura. Consúltelo con su médico.
- Acupuntura:se lleva practicando hace más de 3000 años y para muchos es crucial en el alivio del dolor a través de la liberación natural de algunos neuroquímicos si se estimulan algunas partes del cuerpo.
- Vitamina D: algunas investigaciones sugieren que las mujeres están más propensas a la Artritis Reumatoide, sobre todo si se encuentran en zonas poco soleadas. La falta de exposición al sol podrá causar una deficiencia de vitamina D. También se sabe que la falta de vitamina D está relacionada con otras enfermedades autoinmunes.
- La regla de oro: descanse y no desgaste aún más su rodilla cuando le duela. Se ha demostrado que las personas que reciben tratamiento y se cuidan en las primeras fases de la Artritis Reumatoide u Osteoartrosis terminan sintiéndose mejor y más a menudo. Aumentará la probabilidad de vivir una vida más plena y activa. También estarán más protegidas del daño irreversible de sus articulaciones, lo que podría conllevar a una cirugía o sustitución de rótula.
En todo caso, si su lesión es grave y las articulaciones de sus rodillas ya se encuentran demasiado dañadas, provocándole incluso alguna discapacidad física, la cirugía podrá ser el próximo paso. Estas son las intervenciones más comunes:
- Artroscopia: cuando el cartílago está muy dañado, se va despedazando, esta técnica de cirugía ayudará a limpiar los pedazos rotos, disminuyendo el dolor al paciente. Cuanto más avanzada esté la osteoartrosis en la rodilla, menos eficaz será esta intervención.
- Osteotomía: esta intervención conlleva el corte del hueso cerca de la rodilla para ayudar a disminuir la tensión sobre la rodilla.
- Sustitución de la rótula: esta sustitución podrá ser parcial o total, y consiste en colocar una prótesis que hará la función de una rodilla sana.
Después de la cirugía, el proceso de recuperación podrá tardar hasta 12 semanas. Mientras tanto, los pacientes deben tener extremo cuidado para recuperar lo mejor posible, ya que el más mínimo esfuerzo o tensión en la rodilla podrá echar por tierra todo el procedimiento y empeorar su condición.
Es cierto que cada caso es distinto, pero la verdad es que no todos los problemas en las rodillas necesitarán cirugía si logramos mantener un estilo de vida saludable y hacemos lo posible por preservar nuestras rodillas, mientras nos enfocamos en el tratamiento de los síntomas, siempre que se presenten.
Stannah reitera que la prevención es un factor para retrasar el desarrollo de una condición que a menudo parece inevitable a medida que envejecemos. Aun así, sabemos que a menudo nos descuidamos y no pensamos en las medidas preventivas más obvias.
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